Última actualización: 06/10/2014
Seguro que si te hablamos de Shetland, un grupo de islas situadas entre las Islas Feroe, la costa del suroeste de Noruega y la isla de Gran Bretaña, no te suena mucho. Pero para algunos españoles, como Fernando, se ha convertido en su hogar desde hace algún tiempo.
Este español, de Bolaños de Calatrava (Ciudad Real) y licenciado en Administración y Dirección de Empresas, llegó a estas islas con 26 años, y hoy con 27, todavía sigue en este pequeño rincón del mapa, al noreste de la costa escocesa, que ha cobrado gran importancia para él y para su futuro.
Fernando llegó a Shetland con un nivel de inglés B1, pero debido a la carrera que había estudiado sabía que necesitaba más para poder diferenciarse del resto de candidatos que optaran a un puesto de trabajo que solicitara.
Se decantó por el Programa de Hoteles, frente a otros como Londres 1,2,3 porque además de que el precio era bastante atractivo, esta oportunidad le permitía ganar dinero a la vez que aprendía y, sobre todo, practicaba el idioma para posteriormente poder presentarse al examen de inglés B2 de Cambridge.
Fernando conoció A London a través de Internet mientras buscaba una alternativa que le permitiera irse al extranjero a perfeccionar su nivel de inglés y a la vez pudiera hacer frente a los gastos derivados de esta experiencia.
El proceso que llevó a cabo fue sencillo: dos entrevistas por teléfono, reserva del vuelo y listo. En poco tiempo todo estaba preparado para empezar esta nueva aventura en un destino totalmente diferente.
Fernando nos cuenta que su papel en el hotel es el de general assistant, por lo que puede hacer cualquier tarea en el hotel, aunque la principal ha sido la de waiter. Ello ha supuesto el trato continuo con los clientes, ya que era el encargado de tomar las órdenes y llevarlas a la cocina. Esto le ha ayudado a mejorar rápidamente tanto su comprensión oral como su capacidad de explicar y responder a los clientes siempre que tienen alguna sugerencia o duda.
Como en todo, siempre hay cosas buenas y cosas malas, y Fernando ha hecho balance con nosotros para contarnos que es lo que resalta de esta experiencia.
Respecto a los aspectos negativos, habla de que a veces los managers (no todos) diferencian mucho entre los altos cargos y los bajos, algo que crea un bache entre un grupo y otro, agudizando las diferencias.
Las jornadas, en determinadas ocasiones, han llegado a ser bastante largas, algo que por otro lado es normal en el área de la hostelería, pero que no deja de ser difícil.
Sin embargo, resalta lo positivo por encima de lo malo, algo que cualquier experiencia conlleva. Así se ha dado cuenta que hay gente buena repartida por todos lados, y que por norma general, la gente de la isla es muy amable, abierta y cercana. Desde el principio, Fernando se ha sentido como uno más, porque hay que tener en cuenta que en estas islas casi todo el mundo suele conocerse por norma general.
Además, ha tenido la suerte de trabajar en el departamento de waiting con gente de su edad, algo que hacía todo muchísimo más llevadero por el ambiente que se creaba entre todos los compañeros.
Fernando quiere hacer una mención especial a una de sus managers, Jane, que ha hecho de su estancia algo diferente y mucho mejor de lo esperado. Gracias a ella ha visitado la isla y ha aprendido mucho de lo que sabe. Su trato con los empleados ha sido excelente, basado en el compañerismo, logrando unos mejores resultados para todo el grupo en conjunto.
Respecto a A London, Fernando cuenta que se la recomendaría a cualquier persona que quisiera irse al extranjero a vivir ya que ofrecen un apoyo continuo, algo fundamental, como él afirma, cuando uno se va a vivir al extranjero y te enfrentas a cosas completamente nuevas.
Los planes de Fernando por ahora son obtener el título B2 de inglés y encontrar un trabajo relacionado con su carrera que le permita poner en práctica todo lo que ha aprendido. Afirma que no le importaría cambiar de ciudad, que una vez que se ha ido lejos de su ciudad natal, el destino está donde esté el trabajo, ya que él tiene claro por qué está en el hotel, y lo que quiere conseguir a partir de ahí.
Para terminar Fernando, un chico que un día decidió dar un giro de 180º a su vida yendo a unas remotas islas del norte de Escocia, nos reconoce que recomienda la experiencia, y especialmente la agencia, ya que, en conjunto, te brinda la oportunidad de conocer una nueva cultura y trabajar con gente que aunque a veces no te lo pone fácil, tú consigues superar con muchas ganas y actitud, siendo capaz de alcanzar todo lo que uno se proponga.