Si tienes pensado ir a trabajar a Londres, o bien, estudiar inglés en Londres en alguna de las academias de la ciudad, hoy te proponemos un plan para que los días libres que tengas, no los pases en el sillón, sino que disfrutes de otra de las alternativas que te ofrece esta increíble ciudad.
Además, resulta que unos días antes has visto en la televisión la película de Notting Hill… Vaya, ese barrio tan peculiar y característico, con sus casas de colores y la fachada en la que aparece el nombre de Portobello Road.
Bien, ya sabes el plan que te proponemos hoy: pasar un día en Notting Hill, y en su famosa calle, Portobello Road.
Notting Hill se encuentra muy cerca de Hyde Park, al noroeste del mismo. De este barrio te llamarán la atención sus casas victorianas de impecables fachadas, además de sus jardines. En seguida te darás cuenta de que es uno de los barrios más elegantes y exclusivos de Londres. Pero tranquilo, como ocurre en cualquier calle de esta ciudad, también podrás encontrar prácticamente gran variedad de aspectos; te lo decimos porque seguro que verás a alguien cantando o tocando la guitarra no muy lejos de estas casas tan “posh”.
La calle de Portobello Road tiene una longitud de aproximadamente unos tres kilómetros de largo y conecta Notting Hill con Ladbroke Grove.
Puede que lo más popular del barrio de Notting Hill en Londres sea la famosa librería en la que Hugh Grant y Julia Roberts se conocieron en la película que lleva el mismo nombre que este barrio londinense. Pero nosotros te diremos que Notting Hill es mucho más.
Notting Hill es su mercado, ese que podrás encontrar a lo largo de la calle de Portobello Road, en el que disfrutarás de prácticamente cualquier tipo de comida que te venga a la cabeza; incluso seguro que puedes encontrar una enorme paellera rodeada de gente esperando su ración. Si prefieres lo dulce, podrás merendar un increíble crepe, acompañado de Nutella y fresas, mientras das un paseo por la calle.
Además, también hay una gran cantidad de restaurantes españoles, por si te apetece sentarte en una mesa y comer como en casa a base de sus tapas y raciones. Aunque también puedes comprar los ingredientes como en cualquier supermercado de tu ciudad española, para luego hacer tus platos en casa (¡encontrarás desde Aceite Carbonell hasta tomate frito Orlando!).
Pero si te decantas por probar algo diferente, también disfrutarás de muchos restaurantes de moda y cocina internacional, especialmente en la zona de Westbourne Grove, muy cerca de Portobello Road.
Seguro que te pararás en alguna de las tiendas y puestos que se encuentran a lo largo de la calle, e indagues entre los artículos que venden, muchas veces objetos antiguos de segunda mano (desde ropa, a joyas, discos de música, etc.), o simplemente como se denomina ahora, de aspecto vintage.
Para terminar, si decides ir a trabajar a Londres durante el verano, o simplemente a estudiar inglés en Londres a lo largo del mes de agosto, no puedes perderte el último lunes de ese mismo mes el Carnaval de Notting Hill. Es uno de los carnavales más famosos del mundo, y es una excelente oportunidad que no debes dejar pasar para apreciar la diversidad cultural que puedes encontrar en una ciudad como Londres. Además, te darás cuenta de la influencia que ha vivido el barrio gracias a los inmigrantes jamaicanos que viven en la zona, trayendo sus colores, su música y su alegría a estas calles.
Por cierto, si quieres encontrar la famosa “The Travel Bookshop”, la librería que hemos mencionado al principio que aparece en la película de Notting Hill, no la busques en Portobello Road. Se encuentra en los números 13-15 de Blenheim Crescent.
Te recomendamos que visites Notting Hill los sábados por la mañana, entre las 9:00 y las 18:00, porque será cuando todos los puestos estén abiertos y podrás disfrutar del mercado en todo su esplendor. Por ello, si quieres ir a este barrio londinense en transporte público, te aconsejamos elegir el metro hasta la estación de Notting Hill Gate (Central Line), para ir a través de Pembridge Road a Portobello Road.
Es probable que la calle esté bastante llena de gente (especialmente los fines de semana), pero merece la pena pasar una mañana en este barrio londinense y cambiar los edificios de Oxford Street o la estética de Camden, por casas de colores.
