¿Sabéis cuántas vocales podemos emplear al hablar inglés? Un total de 19, frente a las 5 que tenemos en castellano. Como consecuencia de esto, a muchos de nosotros nos cuesta alcanzar una pronunciación en inglés no ya perfecta, sino correcta y nos haga más fácil la comunicación con nativos.
Hace unos días publicábamos una noticia en la que se hablaba de este tema de la pronunciación en inglés y se prestaba especial atención a por qué los españoles hablamos tan mal el inglés. En el artículo se hacía especial hincapié en el estudio, ya no solo de la gramática inglesa o del vocabulario, sino en cómo articular correctamente cada letra en función de la palabra desde bien pequeños, ya que antes de los 6 años es cuando los niños tienen más habilidad para poder practicar y retener esos sonidos.
Los adultos consideramos que tenemos un buen nivel de inglés cuando somos capaces de escribir frases en la mayoría de los tiempos verbales o de utilizar correctamente el estilo indirecto, por ejemplo. Pero cuando decides ir a estudiar inglés en Londres, te das cuenta de que con eso no vale. No es suficiente tener una gramática correcta, un buen nivel de comprensión y un amplio abanico de palabras como vocabulario; necesitas tener una buena pronunciación en inglés. Solo de esta manera evitarás tener que repetir frases cuando entables conversaciones con nativos porque, aunque a ti haya dos palabras que te suenan igual, a ellos no, y eso es algo en lo que nos debemos centrar los hispanohablantes para mejorar nuestro nivel de inglés.
Como hemos dicho, existen hasta 19 vocales en inglés, y 25 consonantes. Respecto a las primeras podemos diferenciar entre aquellas que solo se pronuncian como una sola letra (12), y las que denominaríamos como diptongo, formadas a partir de la unión de las anteriores (estas son 7).
Respecto a las consonantes, diferenciamos entre cinco tipos:
- Oclusivas (plosives): como la p o la t.
- Fricativas (fricatives): la f o la s.
- Africadas (affricates): El sonido de la «j» en inglés [d̠ʒ]
- Nasales (nasals): la m o la n.
- Aproximantes (apprimants): como la r.
Pero todo esto solo es el principio de la pronunciación en inglés: el aprender a diferenciar entre sonidos y reducir el acento.
Además, durante el estudio de la pronunciación en inglés deberás prestar atención, no solo a la forma de los labios, sino también a la lengua y a la mandíbula. En función de la colocación de cada uno de estos elementos primordiales de la pronunciación, conseguirás articular un sonido u otro.
Así por ejemplo, si decides ir a estudiar inglés en Londres, te darás cuenta que no se pronuncia igual chip que cheap, aunque a muchos nos suele prácticamente igual. En muchas escuelas nos han enseñado que la “i” de cheap es más larga que la “i” de chip, y esa es la única diferencia entre una y otra. Pero no es así; el sonido de la “i” de chip es más similar a una “e” cerrada del castellano que a una “i”, mientras que en caso de cheap, podría asimilarse a una “i” normal.
Puedes pensar que esto no es del todo importante, que sabiendo escribir bien, entender a los demás cuando hablan y hacerte entender de manera aceptable con el resto, es suficiente; pero no te conformes, estas pequeñas diferencias son las que marcan el dominio de un idioma frente al mero hecho de saberlo. Además, esforzándote en estos aspectos, y mejorándolos, conseguirás que las conversaciones con nativos sean mucho más fluidas porque no harán el esfuerzo por entenderte, sino que te entenderán como a uno más.